Submarino
La Presidente de la Nación y sus cómplices ya excedieron la burbuja y ahora conviven, aislados, en un submarino.
Si observamos la conducta desplegada por Cristina Elisabet Fernández en los últimos días debemos concluir que se halla bajo los efectos de alguna droga o de la sinergia producida por la ingesta de psicofármacos que alteran su visión de la realidad, enajenándola aún más en el frenesí de su bipolaridad.
Después del circuito turístico angoleño parece que a la presidente le resulto sumamente agradable la recepción del hombre de color que con mano de hierro domina hace 33 años los destinos de su sometido pueblo. La euforia demostrada por nuestra mandataria, que danzo sin sonrojarse olvidando el excesivo luto autoimpuesto, trascendió hasta nuestras tierras ya que de regreso al país comenzó a reconocer las bondades de la raza negra, destacando su presencia durante la época colonial, al extremo de recordarnos que la madre del Sargento Cabral era negra, tal vez revalorizando así la cotización del dólar en el mercado negro. En fin, pareciera que a la señora Cristina el negro le brindo felicidad y en su embriaguez llego a sostener que el kirchnerismo fue lo mas importante en la historia patria, al extremo que nos devolviera la Patria que nos habían arrebatado (¿?).
Indudablemente la asociación ilícita gobernante vive en un submarino, aislada del resto de los ciudadanos de a pie que vemos como se va destruyendo nuestra economía y se van degradando las instituciones y nuestra forma de vida.
Destruida e inexistente la oposición, que permanece oculta en su madriguera, el fin del kirchnerismo, o cuando menos de algunos de sus miembros, únicamente será posible cuando dentro del submarino surjan luchas intestinas, generalmente por causas tan triviales como las cuotas de poder y el reparto del botín.
Como cualquier banda de facinerosos, la lucha por obtener favores y atención por parte de la jefa, hará que muchos se destruyan entre sí.
Esto es lo único que podrá poner fin a este modelo cleptómano, dado que se advierten feas averías en la psiquis de la Capitana y la estructura hace agua por varios lugares.
La Unidad Médica Presidencial, a cargo del Dr. Bonomo, trabaja con luces de emergencia, ya que en cualquier momento se produce el desequilibrio total que pondrá al submarino en imposibilidad de ascender a la superficie.
UN AIRE NAUSEABUNDO PRESAGIA LO PEOR, PARA ALGUNOS Y ALGUNAS…
Enrique Piragini
Presidente de A.R.I.E.L. ONG
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